Garantizar que un sitio web sea fácilmente navegable es una de las primeras prioridades para quien busca mejorar su presencia digital. En este artículo recordaremos a Jakob Nielsen y los aportes que hizo sobre la usabilidad, con sus famosos diez criterios que te ayudarán a evaluar la correcta implementación de la usabilidad según Nielsen.
Orígenes de la usabilidad
Jakob Nielsen es un reconocido ingeniero de interfaces, conocido por muchos como un gurú o un líder en las técnicas UX, especialmente por su trabajo sobre la usabilidad en la web.
Un artículo de la revista Publicaciones en Ciencias y Tecnología de la PUC del Ecuador señala que para Jakob “el término nace a partir del desarrollo de Internet como red de comunicación, centrado siempre en que los usuarios se sientan cómodos al utilizar una herramienta informática, para realizar distintas actividades y facilitar el desarrollo de su trabajo, permitiendo así evaluar su accionar. Por lo tanto, el protagonista de la usabilidad es el usuario”.
Principios heurísticos de usabilidad web
En 1995, Nielsen propuso el decálogo de los 10 principios heurísticos de la usabilidad web, que en resumen son:
1.Visibilidad del estado del sistema
Informar al usuario de lo que está pasando en el sitio donde está navegando y hacerlo en la mayor instantaneidad posible. Por ejemplo: al descargar un archivo, que se muestre gráficamente tanto el proceso de descarga como la finalización de éste.
Esto significa representaciones como barras que se van completando, indicaciones de tiempo de demora, botones de salida, palabras explícitas que indiquen una acción, etc.
2.Similitud entre el sistema y el mundo real
Según la plataforma Semrush, “El sistema tiene que “hablar” el lenguaje del usuario con palabras o frases que a éste le sean familiares y que pueda reconocer con facilidad”.
Un ejemplo de esto puede ser el carrito de compras. En la cotidianeidad usamos el carrito cuando vamos a un comercio, entonces es fácil asimilar para qué sirve o al menos lo intuimos al verlo.
3.Libertad y control del usuario
Debemos darle la posibilidad al usuario de hacer y deshacer, dentro de lo posible. Por ejemplo y, volviendo al primer principio, en un proceso de descarga, que haya un botón de cancelación durante la acción.
4.Estándares y consistencia
Mantener colores, representaciones y posiciones de ciertos aspectos de las páginas web que ya son socialmente compartidas y aceptadas, es relevante para no caer en confusiones y simplificar la navegación.
Por ejemplo: el ticket y el color verde los asociamos a aceptar una cosa, pero la equis y el color rojo, a cancelar.
5.Prevención de errores
El ser humano es muy propenso a cometer errores y es por esto que tenemos que darle la posibilidad al usuario de que pueda prevenirlos o corregirlos.
Un ejemplo es al crearse una cuenta con su respectiva contraseña, completarla dos veces y dar aviso de que son iguales o son diferentes, para que así la persona pueda saber y chequear en caso de error.
6.Reconocer antes que recordar
Los sitios web deben funcionar sin tener que obligar a los usuarios a memorizar.
Un ejemplo muy común de esto es el rellenar datos personales para registrarse o iniciar sesión en Internet. Se despliega una barrita en donde debes escribir tu nombre y apellido, pero la clave aquí está en dejar un texto fuera del cuadro que será rellenado, para así no olvidar la indicación.
Muchos sitios caen en el error de mostrar provisoriamente la acción, apoyándose en la memoria del usuario que puede simplemente olvidar qué debía hacer.
7.Flexibilidad y eficiencia de uso
Sobre este principio, la plataforma Semrush indica: “Tenemos que tener un sitio web preparado para todo tipo de usuario, desde los más novatos hasta los más experimentados.
Si conseguimos que cualquiera pueda navegar por nuestra web, logramos flexibilidad. Y si tenemos opciones para los más experimentados obtenemos eficiencia”
Esto lo vemos en Linkedin, pues su contenido se adapta al tipo de usuario: los que buscan trabajo, los que quieren hacer algún curso, los que solo buscan contactos, etc.
8.Diseño estético y minimalista
Menos es más en los diseños de los sitios web. Quita lo que es innecesario tanto de ver para el lector como lo que no es imprescindible en tu infraestructura interna de datos y códigos.
El usuario necesita la información justa y precisa, sin distraerse ni sentirse abrumado en la navegación de un sitio y para eso es imprescindible un diseño que no esté sobrecargado.
9.Ayuda al usuario a reconocer, diagnosticar y recuperarse de los errores
No todos los usuarios comprenden códigos, por lo que no es la mejor idea indicar un error en la navegación a través de estos. Sí es correcto advertirle al usuario en palabras comunes y corrientes, como: Lo siento, página no encontrada.
Y no tan sólo indicar el error y que la persona lo comprenda, sino que también permitirle al usuario recuperarse de este mientras se queda en la página, como recomendando otras páginas o salidas en el mismo sitio para que no abandone.
10.Ayuda y documentación
La idea de todos estos principios es que la navegación se haga tan fácil y amena, que no sea necesario utilizar alguna guía de ayuda. Sin embargo, siempre hay que darle al usuario la posibilidad de tener un manual de funcionamiento o un espacio donde pueda resolver dudas por su cuenta, por ejemplo, con el apartado de preguntas frecuentes.

Herramientas para prueba de usabilidad
Ya conociendo los principios heurísticos, sigue evaluar la usabilidad de un sitio. Para esto existen herramientas para los diseñadores, que según Boris Fernandois, jefe de Experiencia de usuario y métricas de Fusiona, han avanzado mucho los últimos años, sobre todo en la pandemia.
“Algunas de las herramientas que hemos utilizado en Fusiona para pruebas de usabilidad son los Heatmaps de Hotjar, Lookback, UsabilityHub, Optimal Workshop, UserTesting, Lucidchart, Adobe XD y Figma.
Estas herramientas ofrecen una amplia variedad de características y funcionalidades que hacen más fácil para los equipos evaluar la usabilidad de un producto o servicio y mejorar la experiencia de usuario”.
Boris hace hincapié en que las herramientas o metodologías que se usen sean de acuerdo a las necesidades específicas y los objetivos tanto del proyecto como de la empresa.
Además, recomienda no quedarse con solo una. “Mientras más fácil se integre con otras herramientas que se utilizan en el equipo, será más efectivo el trabajo”.
Para finalizar, recordar incluir análisis de datos, pues “es fundamental tener acceso a herramientas de análisis de datos robustas y avanzadas para poder entender los resultados de las pruebas de usabilidad y tomar decisiones informadas sobre cómo mejorar la experiencia de usuario”.